lunes, 21 de septiembre de 2009

En el rastro de Madrid,

Ayer estuve en el rastro, y a pesar de que soy vaga, muy vaga, y no acostumbro a llegar antes de las 12, me encontre a un señor que me vendia 3 barris por 5 euros, asi que ni miré, y los compré.

Al llegar a casa me llevé una gratiiisima sorpresa. Habia visto que uno era un barriguitas retoño, pero no me fijé en que era niña. 


El segundo era monisimo, más antiguo.



Y el tercero....tachan! no era un barris, sino un nenuco mini, que a pesar de conocer su existencia, no habia visto nunca en la mano. Me encannnnta....



Creo que de los pequeñitos que tengo, ocupa ahora el lugar de favorito.

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